Podría haber sido Tigregatica, porque a él le hubiese gustado más. Pero el apelativo de Mono lo definió por las buenas y por las malas, que son las que quiero incluir en este blog. Las buenas y las malas de antes y de ahora. Las mías y las ajenas. Las de nuestro país y las del mundo. Las que nos permiten vivir y las que nos obligan a hacerlo. En Dios creo, y en algunas personas (muertas y vivas) también. No demasiadas. Pero suficientes. Todos los demás, que paguen al contado.

viernes, 17 de octubre de 2008

17 DE OCTUBRE

Quitarle a los que menos tienen para darle a los que tienen más, es tan fácil como recitar las vocales. Es lo que hizo y lo que hace habitualmente el liberalismo, aquí y en todas partes. /////////////
Quitarle a los que más tienen para darle a los que tienen menos, es riesgoso y/o sangriento. Cuba y Rusia son buenos ejemplos. /////////////////////
Lo realmente insuperable es darle a los que menos tienen, sin forzar ni violentar, con el único riesgo que conlleva caer y levantarse, todas las veces que sea necesario. Ese es -ni más ni menos- el principio y el fin de la idea peronista. Una idea argentina. Y gloriosa. /////////////////////// ¡Feliz día!//////////////////
A quien corresponda. /////////////////////////

3 comentarios:

Anónimo dijo...

feliz día

V

Luciano dijo...

Saludos tardíos, Enrique.

El 4161 dijo...

Es un excelente momento mundial para recordar, como se hace en este post, a la idea de la tercera posición justicilista.
¡Celebramos esa reivindicaciòn!
Un saludo