Podría haber sido Tigregatica, porque a él le hubiese gustado más. Pero el apelativo de Mono lo definió por las buenas y por las malas, que son las que quiero incluir en este blog. Las buenas y las malas de antes y de ahora. Las mías y las ajenas. Las de nuestro país y las del mundo. Las que nos permiten vivir y las que nos obligan a hacerlo. En Dios creo, y en algunas personas (muertas y vivas) también. No demasiadas. Pero suficientes. Todos los demás, que paguen al contado.

jueves, 18 de diciembre de 2008

AHORA SÍ, TERMINA EL SIGLO XX

Ocurrirá exactamente dentro de dos semanas, el 1º de enero, o siete días más tarde, el 8. En cualquier caso, se tome la fecha convencional del triunfo de la Revolución Cubana, o el ingreso de Fidel Castro a La Habana comandando la caravana nacional desde la ciudad de Santiago, se cumplirá medio siglo de la más extraordinaria experiencia política y social de una centuria, que ha demorado en concluir hasta aquí, precisamente para coincidir con la victoria total de un pueblo y de una gesta profundamente latinoamericana, un hito ya imposible de destruir, neutralizar, pasar por alto o subestimar.

Harán 50 años de aquel enero de 1959, grabado a fuego en la cabeza de los poderosos del mundo, de todos los imperios, de todos los injustos y de todos los herejes. Con Fidel en el poder o en su autoimpuesto segundo plano, ya nada podrá modificarse.

Mañana puede ser nunca. Pero nunca pudo ser hoy.

1 comentario:

walter besuzzo dijo...

Feliz navidad
Dios se hace hombre y después obrero de la construcción